¡Atrapa la cooperación!
El juego del «Zorro y las Gallinas» es mucho más que una actividad lúdica: constituye una auténtica experiencia cooperativa dentro del entorno escolar.
Cooperación: aunque existe un componente de oposición (el zorro persigue a las gallinas), el verdadero reto está en la capacidad de las gallinas para mantenerse unidas y protegerse unas a otras, reforzando la interacción social y el trabajo en equipo.
Autocontrol emocional: los participantes aprenden a gestionar la tensión del juego, regulando sus emociones y manteniendo la calma en situaciones de presión.
Agilidad y desarrollo físico: la dinámica favorece la rapidez de movimientos, la coordinación y la motricidad, contribuyendo al bienestar corporal.
Inclusión: todos los niños y niñas tienen un papel activo en la actividad, fomentando la participación equitativa y el sentido de pertenencia.
Respeto de las normas: el juego se convierte en un espacio para interiorizar reglas, comprender su importancia y aplicarlas en un contexto divertido y seguro.
En definitiva, se trata de una situación de aprendizaje integral que combina desarrollo físico, social y emocional, ofreciendo a los estudiantes un entorno escolar lúdico, inclusivo y seguro donde crecer juntos.
