El alumnado de 4º del colegio Santísimo Sacramento participó en la semana verde. Fueron tres días intensos e inolvidables.
Salieron el pasado miércoles día 9 a las 9h desde el colegio con sus equipajes llenos de ilusión. Era la primera vez que participaban en actividades de este tipo. Su destino era un pueblo del norte de Navarra, Narbarte, en el que estuvieron alojados en un albergue hasta el viernes 11.
Comenzaron la actividad montañera con las tirolinas gigantes en un monte cerca de Elizondo. No se pueden describir las sensaciones y la adrenalina en su cuerpo. Estar a más de 100m de altura es indescriptible.
La vía ferrata también les gustó. Subieron un monte escarpado enganchados a los arneses y a unos peldaños de hierro. Imposible caerse, la seguridad con la que ascendían era total.
Después de una cena suculenta y un reparador descanso, al día siguiente se vistieron con el traje de neopreno para realizar rapel y descenso de cañones también cerca de Elizondo. El vértigo y el agua helada del río no fueron excusa para disfrutar de un baño divertido. Por la tarde se subieron a los árboles y realizaron seis niveles de dificultad, superando pruebas y disfrutando de las tirolinas con las que se chocaban contra los árboles. Se oían las risas y de vez en cuando un grito de susto por el vértigo.
Finalizó la semana con el piragüismo en el río Baztán el viernes por la mañana. Aunque no era fácil dirigir la piragua dada su inexperiencia, todos consiguieron llegar a su destino, Legasa.
Nunca olvidarán estos días de deporte de riesgo en la naturaleza, en un paraje tan bonito como es el valle del Baztán, con sus compañeros de clase. Con mucha pena, regresaron a Pamplona a la vida rutinaria, cansados pero contentos por haber tenido la suerte de disfrutar de unos días diferentes.
