El alumnado de 1º de ESO, desde la asignatura de valores éticos y cívicos, inició en el mes de octubre una campaña de recogida de tapones de plástico para ayudar a Emma, una niña de 4 años con Síndrome de Rett para que pudiese mejorar su calidad de vida.
Emma necesitaba recoger 42 toneladas de tapones que servirían para sacar el dinero suficiente que cubriera el coste de una terapia específica de rehabilitación para mejorar su movilidad y frenar el avance de su enfermedad.
Gracias al esfuerzo de muchas personas e instituciones, entre las que se encuentra nuestro centro educativo, el reto se consiguió.
Con posterioridad nos metimos en la aventura de ayudar a Ismael de 12 años el cual tiene encefalopatía genética. Se necesitaban conseguir 25 toneladas de tapones para poder canjearlos por el dinero que supone su plano inclinado prono/supino adaptado para él y que le ayudará a mejorar la calidad de su vida y hoy nos llena de satisfacción el saber que este reto también se ha conseguido.
Ahora se nos presenta el caso de Ángela, una niña de 8 años que vive en Villa del Prado (Madrid) y que necesita 22 toneladas de tapones para financiar el coste de una silla de ruedas adaptada que mejore su calidad de vida tras sufrir la amputación de ambas piernas debido a una Sepsis Meningocócica.
Pedimos vuestra colaboración. Se pueden reciclar tapones de botellas de agua y refrescos, de detergentes y de otros productos de limpieza, tapones de pasta de dientes y desodorante, tapas de botes dispensadores de salsas tipo mostaza, mayonesa o ketchup, tapas de cremas solares y de paquetes de toallitas húmedas…
Los tapones debéis depositarlos en un contenedor que hemos instalado en la portería del colegio.
Muchísimas gracias por hacerlo posible.